Los partidos políticos que hasta ahora nos han gobernado, PP y PSOE, se han acostumbrado a decir y pedir unas cosas cuando están en la oposición y otras muy diferentes cuando tienen la responsabilidad de gobernar.
Como no podría ser de otra manera, en materia energética pasa lo mismo.
El gobierno actual se quejaba, y con razón, de la falta de seguridad jurídica de nuestro sistema de régimen especial tras losRD 1565/2010 y RDL 14/2010 y la agonía de incertidumbre que provocaba en el sector mandado globos sonda cada dos por tres.
Sin embargo no mentían diciendo que apostaban por las renovables y criticaban frecuentemente a la energía solar y el régimen especial en general, curioso cuando la normativa base la aprobaron ellos en 2004. Apostaban por la nuclear y seguían las indicaciones cortoplacistas de FAES.
Llego el colapso y, con una tardanza de un año, cambiaron el sistema retributivo en el RD 1578/2008, por uno de cupos con tarifa decrecientes por convocatoria mucho más acorde a la realidad del sector y a la evolución de los precios del mercado, pero llego la crisis, y el consumo eléctrico bajó, y el déficit de tarifa empezó a subir, y todos se pusieron muy nerviosos, y empezaron a mandar globos sonda de recortes de primas, de posible retroacitvidad y dejaba al sector al borde un ataque de estrés y se les ocurrió limitar primero el número de horas de funcionamiento y el número de años que perciben las centrales tarifa especial a todas las instalaciones existentes y venideras, sobre todo las anteriores a octubre de 2008 que se habían beneficiado de su barra libre.
Ahora, desde la oposición, en el PSOE vuelven a ser súper fans de las renovables y dicen que actuaron mal, que nunca debían haber publicado los decretos de 2010.
Vaga va, a otros con esos cuentos, que luego os contratan como asesores las grandes empresas energéticas.