No hay duda que nuestro planeta tierra es finito, es decir, que no se expande por todo el universo y no se regenera todo instantáneamente.
Cualquier mineral que se extraiga de la tierra deja de estar presente durante un largo tiempo, quizá para siempre, por eso, la máxima ecologista de las 3 «R» tiene que estar presente en todos nuestros actos y compras.
Porque tú sabes lo que son las 3 R ¿verdad?
Bueno, no todos somos iguales ni sabemos lo mismo, pero te dejo que pienses un poco para que averigües de lo que estoy hablando, y si no quieres pensarlo, te lo escribo aquí abajo.
- Reduce. Consume menos, menos de todo. Así se necesitará extraer menos materiales de este planeta llamado tierra.
- Reutiliza. Los productos pueden tener muchos usos. Igual hay cosas que ya no te valen para el uso que tu das pero otra persona puede aprovecharlo. Dos ejemplos, primero, yo estoy comprando ordenadores para la empresa que provienen de usos anteriores en renting. Segundo, ¿Conoces a alguien con coche de segunda mano?
- Recicla. Es decir, separa los materiales que puede tener una segunda vida para que sea fácil que la tengan, y no solo eso, utiliza materiales reciclados en tu día a día.
Estos son los principios en los que se basa la economía circular que posiblemente hayas oído y que debemos de esforzarnos en ponerla en práctica con pequeños pasos.
¿Qué materiales reciclados puedo encontrar?
Seguro que usas materiales reciclados aunque aún no lo sepas. Puedes encontrar en el mercado desde chatarra reciclada, papel reciclado, plásticos reciclados, madera reciclada y todo tipo de metales reciclados.
De hecho, todo se utiliza cada día estos tipos de materiales reciclados. Por ejemplo, los tetra brick de leche o zumo están hechos casis todos ellos con cartones y aluminios reciclados, ¿lo sabías?
Para poder reciclar los materiales, eso sí, cada uno de nosotros debemos gestionar correctamente los residuos que generamos, porque, queramos o no, generamos residuos.
¿Dónde puedes reciclar cada material?
Reciclar cartón, envases o vidrios es fácil, cerca de tu casa seguro que tienes contenedores. Pero, ¿y el resto de materiales?
Pues para el resto de materiales tienes que llevarlos a los gestores de residuos adecuados. Puedes encontrar unos que reciclen metales, otros electrodomésticos con gases fluorados, otros plásticos, madera, electrónica, etc. Además, por muchos productos te pagaran un buen pico.
Además siempre tienes la posibilidad de usar los puntos limpios o ecoparques de tu localidad. Estos puntos públicos son auténticos gestores de residuos que facilitan la labor de manera gratuita.
¿Cómo puedes entrar en la economía circular?
Bueno, no se suele estar dentro de una economía circular pura nunca, pero fuera tampoco, pero si sigues estos puntos estarás ayudando a que tu entorno sea más sostenible.
- Consume local. Si compras productos producidos en tu localidad ahorrarás en embalajes, transporte y combustible, lo que hace que se necesiten menos recursos naturales.
- Reutiliza los productos (tuyos o de otros). En casa tenemos un perchero que proviene de una madera vieja y cubiertos en desuso y unas estanterías que antes eran cajones. Darle una segunda vida a algunas cosas a veces puede ser fácil y no tienes por qué hacerla tú, pues seguro que encuentras alguna tienda o taller donde te puedan ayudar.
- Recicla, recicla y recicla. Separa la basura siempre, no tires cualquier cosa al contenedor y ten presente que cada material puede tener una nueva vida.
- La segunda mano es «cool». Lo dicho, no solo vale para el coche. Hoy en día con la aplicaciones del móvil se puede comprar y vender de todo.
- Compra productos reciclados. Igual que ves la etiqueta de los productos de alimentación, pregunta de donde proceden los materiales de las cajas que compras, de tu bicicleta o de cualquier cosa. Te sorprenderás muchas veces.
