Cualquier persona o empresa actúa de una determinada manera en el trabajo, y, siempre, se piensa que se hace de la manera correcta cuando no se conocen los errores propios, o bien porque no se ven o nadie se los ha dicho, y entonces le llevan a repetir situaciones, acciones y comportamientos que pueden lastrar su eficacia y efectividad.

Lo mismo pasa con el consumo energético, si no se conoce como y cuanto se está consumiendo difícilmente se va a pensar en realizar algo para corregirlo, pues se está convencido en que se consume lo que se debe consumir.

Por eso, tener alguna aplicación que te muestre cuanto, como y cuando estás consumiendo la energía es una importante pieza de ahorro energético, si serlo realmente. A esto se le llama monitorización.

Sistemas de monitorización hay muchos, de muchas marcas, precios y tipos, que controlan tu instalación térmica o eléctrica, y, para saer eficiente, siempre deben incorporar las siguientes características.

  • Debe medir la curva horaria de consumo, es decir, cuando se consume la energía y cuanta es la máxima energía consumida de forma instantánea.
  • Debe mostrar las medidas de forma sencilla e intuitiva, en tablas y gráficos que cualquiera pueda leer.
  • Debe ser multiplataforma, para que pueda verse en una pantalla propia, en el ordenador, o, incluso en el móvil en cualquier momento.
  • Debe poder introducir el precio de la energía y el coste que supone el consumo tal y como se está realizando.
  • Debe permitir hacer comparativas de costes en el caso de realizar alguna actuación de ahorro energético o cambio de hábitos.

Muchas veces, solo con cambiar el momento de encender aparatos se puede ahorrar mucho dinero, y con un sistema de monitorización se puede comprobar. Además, cuando se está pendiente de los datos proporcionados, se tendrá más conciencia para conseguir un consumo responsable.