Haciendo una ojeada convencional a las diferentes noticias web he visto una información interesante a través de Scoop.

Siempre se ha dicho que para que el uso de las energías renovables de extienda lo máxima y no se necesiten otro tipo de fuentes de energía sería necesario el abaratar la manera de almacenar la energía producida y que esta sea eficiente.

Un campo de batalla importante para la reducción del consumo de recursos naturales en nuestro planeta es la reducción del consumo de agua.

Con el afán de reducir las emisiones de CO2 y la dependencia en el consumo de combustible, las casas automotrices a nivel mundial han desarrollado motores propulsados por combustibles alternativos.

La reducción de las reservas de los combustibles fósiles (sobre todo petróleo) muestra la necesidad urgente de contar con otras fuentes alternas de energía renovables, limpias y económicas, tales como la eólica (la producida por el viento), la hidroeléctrica y la solar.

La asociación ecologista WWF ha atracado en Valencia su catamarán solar, que funciona únicamente con placas fotovoltaicas.

Hoy en día existen dispositivos de gestión y control centralizado del consumo energético de un edificio.

Ahorrar energía, ahorrar dinero y evitar emisiones de CO2.

Ya don Quijote, en su ingenio, creyó ver en el paisaje manchego unos gigantes que movían sus brazos.