El carbón es un recurso natural que se utiliza desde hace dos siglos como fuente energética.
Fue un elemento básico en la industrialización del mundo, al aportar la energía necesaria para que la máquina de vapor funcionara bien y pudiera producirse más.
Durante el siglo XX las máquinas de carbón se fueron substituyendo por derivados del petróleo, como gasóleos, fuel, gasolina, gas butano o propano y a finales del siglo también por gas natural, quedando el uso del carbón principalmente para algunas centrales eléctricas obsoletas y sucias.
El motivo del cambio fue, principalmente, que el coste de extraer el petróleo era inferior y el poder calorífico mayor, motivo por el cual el carbón dejaba de ser rentable.
Hoy en día, además, se tiene en cuenta el aspecto medioambiental, donde resulta que el carbón es el combustible, tanto para producir calor, transporte como electricidad, más contaminante que existe, y donde se está tendiendo a substituir todos los combustibles fósiles por energías renovables.
El trabajo en las minas es inhumano. Es un trabajo físicamente muy exigente, en condiciones de salubridad e higiene no muy deseables, con riesgo de accidentes mortales y, por si fuera poco, donde la merma de la salud de los trabajadores es tal que tienen la necesidad de jubilarse muy jóvenes y casi siempre con secuelas.
Desde los años ochenta en España se suceden manifestaciones y conflictos porque el sector se sustenta en la subvención directa del estado, y los gobiernos, unos tras otros, no han hecho lo que tenían que hacer.
Lo único que puede evitar para siempre los problemas con los mineros es, por un lado hacer un plan de reindutrialización ambicioso en las zonas mineras y educar para que nadie quiera ser minero.
La minería debe ser una actividad a extinguir por:
- El riesgo en la salud de los trabajadores.
- La elevada contaminación ambiental que produce la quema de carbón y el daño que se le hace al terreno donde se ubican las minas.
- La necesidad de un desarrollo de las energías renovables, nicho por donde pueden recolocarse los trabajadores del sector.
