En el campo de la generación de electricidad se está avanzando para conseguir un futuro 100 % renovable.
En este sentido los costes de generación e implantación están bajando a pasos agigantados, teniendo en muchas ocasiones costes muy inferiores a las energías convencionales con energía eólica o solar, sobre todo en islas o sitios con bastante sol o viento como el sur de España.
Una de las críticas que se hacen de estos sistemas es la gestión de los mismos, la gestión de la producción.
Aquí tenemos dos campos, la gestión cuando se está produciendo, para la cual no hay ningún problema, pudiéndose regular la energía que se genere en los diferentes dispositivos gracias a la informática y a la electrónica asociada.
El problema todavía lo tenemos en la generación de electricidad en momentos críticos, cuando no hay sol o viento.
Para ello se necesita aún desarrollar los elementos de almacenamiento de energía, como las baterías y las pilas de combustible.
El proceso de abaratar costes y mejorar prestaciones en este campo es lento, pero se están consiguiendo resultados, como demuestra esta noticia de Infoambiental.
Es fundamental seguir investigando en ello, y todos los ciudadanos agradeceríamos, consciente o inconscientemente, que los estados inviertan en ello, además de fomentar la iniciativa privada con las herramientas oportunas.
Es un campo que propicia independencia energética y puestos de trabajo de calidad, en industria innovadora y de futuro, por lo que es muy aconsejable hacer un esfuerzo al respecto.