El objetivo de vivir en una minicasa:
Se consideran minicasas a aquellos diseños de viviendas con una superficie de planta de entre 10 y 50 metros cuadrados. El tamaño con el que cuentan es la principal diferencia con respecto a las viviendas convencionales, claramente de ahí viene su correcta denominación.
Otra importante diferencia destacable en estas particulares construcciones, es el adecuado diseño de los espacios interiores que la conforman. La vida en el interior de una minicasa no es comparable a las actividades que se realizan en las viviendas convencionales, en las que, por lo general, se cuentan con espacios propios para cada actividad (cocina, dormitorios, sala de estar…). En una minicasa es preciso compartir espacios y adecuar soluciones para el correcto uso de cada uno.
Las principales soluciones que ofrece una minicasa son elementos móviles, de reducido tamaño y con opciones plegables que permitan ampliar su tamaño en caso de necesidad. Ejemplos de esto se pueden ver en mesas abatibles, asientos pequeños y que permitan ser recogidos, o almacenamiento en los huecos que genere el diseño (como bajo escalera o bajo el sofá).
Vivir con la filosofía “a lo mini” conlleva importantes beneficios ambientales, y además positivas repercusiones económicas para aquellos valientes que se embarcan a este estilo de vida.
Vivir “a lo mini” prioriza la pertenencia única de aquellos objetos que sean estrictamente necesarios, con lo cuál se reduce de una manera muy importante el consumo y la adquisición de artículos que no tengan un papel en el interior de la minicasa.
Aunque, a priori, no resulte atractiva para muchos, la idea de comer y dormir en el mismo espacio, es importante saber que esta opción permite que una zona ya acondicionada sea práctica para las actividades deseadas aprovechando de forma múltiple las operaciones que en su día se realizaron para conseguir el espacio habilitado. Comparándolo con viviendas convencionales, resulta positivo el ahorro siempre que se valore el gasto de climatización, luz y resto de equipamiento que precisan estancias independientes.
Pero si lo que nos resulta atractivo de las minicasas es su uso diferente al de vivienda habitual, estas se pueden diseñar para ser utilizadas como apartamentos vacacionales o por temporadas. Esta opción permite planificarlas con un diseño adaptado, evitando instalaciones y elementos que no vayan a ser utilizados.
Otras interesantes alternativas de minicasas son la ampliación de espacios para instalar un cuarto de invitados, un despacho, o ampliar la zona de ocio. Todas estas opciones fuera del uso de vivienda habitual, no dispondrán de un gran despliegue técnico en la adecuación de suministros energéticos, estos estarán diseñados acorde con la actividad concreta.
Por supuesto, la principal ventaja que ofrece la modalidad mini de viviendas, es la reducción del gasto en energía y mantenimiento que requiere. Una minicasa puede, sin ningún problema contar con material aislante térmico y además suministrarse energéticamente mediante sistemas de producción renovable, tanto para energía térmica como para energía eléctrica.
Ventajas de las minicasas:
- Tienen un menor impacto en su construcción empleando menos materiales y posiblemente el uso de materiales locales y reutilizados.
- Cuentan con un menor gasto energético en su uso diario.
- Si la minicasa es fija, no requerirá costosos traslados puntuales.
- Admite diseños bioclimáticos adaptados a la zona de ubicación.
- Cuentan con un menor mantenimiento del conjunto de la estructura.
- Actualmente existen multitud de opciones para adaptar la minicasa a las necesidades del usuario, tanto en diseño, como en funcionalidad, como en el cubrimiento de las necesidades energéticas básicas.
- Las minicasas pueden construirse en cualquier lugar habilitado.
- Dependiendo del tamaño y diseño, su construcción puede durar pocas semanas.
- Admiten soluciones modulares para su ampliación en caso de ser necesario.
- A pesar de contar con plantas reducidas, se puede amplia superficie en altura.
Inconvenientes de las minicasas:
- Es preciso adaptar el diseño interior de la minicasa al aprovechamiento y multifuncionalidad de cada espacio.
- En el caso de minicasas móviles, se requiere de instalaciones energéticas autónomas y sin suministros canalizados.
- El diseño de una minicasa móvil está limitado a las condiciones necesarias para su transporte.
- El traslado de minicasas implica un caro despliegue técnico además de las emisiones contaminantes de los equipos encargados del transporte.
- El usuario de una minicasa debe priorizar el correcto uso de las instalaciones para evitar un sobredimensionamiento así como una falta de confort en el uso de la minicasa.
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