Repsol merece más atención que 46.000.000 de españoles

Por lo que se ve ya tienen carnaza los medios de comunicación para desviar la atención.
El gobierno argentino ha decidido nacionalizar el 51% de YPF al considerar el petróleo como un bien estratégico.
El proceso se enmarca en un momento en que Argentina está importando gas y petróleo para autoabastecerse, ya que la producción ha caído en lo últimos años como se ve del gráfico siguiente sacado del artículo de El País que dice que el gobierno aplicará medidas contundentes contra Argentina.
Es decir, que España va a tomar cartas en un asunto que corresponde a una empresa multinacional privada, que tiene sede central en España y proviene de ser una empresa pública privatizada, pero que ya no es española, porque tiene más del 50% de sus acciones en manos de capital extranjero y tributa solo un 25% de sus beneficios en España.
Yo creo que la intervención de nuestro gobierno en el asunto es una falta de respeto a todas las personas que están sufriendo los recortes y el paro en nuestro país que necesita escuchar respuestas tan o más enérgicas que estas para defender nuestros derechos ante Europa y los mercados y recibir estímulos a la actividad económica para poder encontrar trabajo y bienestar social.
En Argentina lo ven de forma un poco diferente, pero tampoco están del todo conforme. Merece la pena ver este vídeo análisis para comprobar que el decreto presentado no afecta solo a YPF, también a las demás petroleras que allí operan y en el que ponen de manifiesto el riesgo existente para que el gobierno argentino pague a Repsol por sus acciones.
Estos bienes estratégicos no deberían ser propiedad de pocas familias u oligarquías, deberían dar un aporte al conjunto social de un territorio, mejorando sus servicios y sus posibilidades como pasa en Noruega, para lo cual hay varias opciones, o que lo exploten empresas estatales o un pago de impuestos acorde a los beneficios proporcionados.
Yo estoy más a favor de lo segundo, de gravar con altos impuestos los beneficios, porque la estatalización de empresas privadas puede llevar consigo una espiral viciosa de corrupción que terminen beneficiando a los amigos de los políticos, como en caso de YPF puede pasar con el accionista argentino de la misma, la famiila Eskenazi, que no pierde ninguna acción, todas las que nacionalizan son de Repsol, y pasa a ser mayoritario, al repartir el estado sus acciones con las provincias de los yacimientos. Miedo me da que pasado unos pocos meses o años pase parte del accionariado del estado a esta familia.
El petróleo es un sector estratégico aún, esperemos que por poco tiempo, que como se aprecia en el mercado anterior cada vez produce menos, pero aún es la joya de la corona de los países que los poseen y por lo cual se quieren hacer prospecciones en Canarias o Valencia, pero debemos de olvidarnos de él ya, es el pasado, hay que invertir en otras tecnologías, nuevas, más limpias y sostenibles, para conseguir nuevos mercados y menos dependencia unos países de otros, así se conseguirá un avance en la fraternidad humana y la relación entre sus individuos.

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